Las fuerzas feministas, en medio de la indignación, piden piden que se detenga el desangre contra las mujeres. El pasado 27 de marzo una mujer salvadoreña identificada como Victoria Salazar, murió en la ciudad turística de Tulum en México mientras era sometida por la policía.
De acuerdo con las autoridades, Victoria fue detenida por «alterar el orden público», pero los videos de los momentos previos a su arresto revelan que la mujer no agredió a nadie. Una serie de grabaciones que le dieron la vuelta al mundo dejaron ver cómo victoria era esposada contra el suelo mientras una mujer policía le ponía su rodilla en la espalda y cómo su cuerpo era subido a una patrulla.
La Fiscalía del estado de Quintana Roo confirmó que Victoria falleció por una fractura en la parte superior de la columna. Victoria trabajaba en el área de limpieza de un hotel. Era madre de dos hijas, había huido de El Salvador por la violencia y la falta de oportunidades. Llegó a México en 2016 y en 2018 obtuvo la residencia por razones humanitarias.
Nuevo movimiento contra la brutalidad policial crece en las redes sociales
Retratos de Victoria elaborados por ilustradores hoy inundan Internet. France 24 consultó a Érika Guevara Rosas, directora para las américas de la organización Amnistía Internacional, quien advirtió que el de Victoria no es un caso aislado. « En el caso de Victoria atraviesa la tragedia que viven las personas migrantes y refugiadas, la violencia que enfrentan en los países de tránsito y en el país de destino. La representante de la ONG agregó que «el caso de Victoria es un reflejo de la alarmante violencia de género, violencia contra las mujeres en México, un país en donde se calcula que entre 10 y 12 mujeres son asesinadas cada día. »
El caso de Victoria generó particularmente la indignación de los movimientos feministas que impulsaron una vez más las campañas #NiUnaMás y #NiUnaMenos, que rechazan la violencia contra las mujeres, los feminicidios y la inoperancia de la Justicia. Esta vez Victoria falleció a manos de la fuerza pública. Un informe de 2019 de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe demostró que después de Brasil, México tenía el mayor número de mujeres asesinadas por razones de género.
«El uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades es una constante»
Érika Guevara Rojas dijo que «lamentablemente el uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades policiales y militares es una constante porque no se accede a la justicia en estos casos». Las últimas grandes protestas contra la brutalidad policial en México se dieron en junio del año pasado, cuando el joven Giovanni López murió bajo custodia de la policía tras ser arrestado por no usar tapabocas. Las autoridades determinaron que murió a causa de un trauma craneoencefálico.