Corea del Norte ha condenado a Israel por convertir a la Franja de Gaza «en un enorme matadero humano y lugar de masacre de niños» durante el reciente conflicto con Hamás.
El Ministerio de Exteriores del país asiático declaró en un comunicado que «el horrible crimen de Israel de matar a niños, similares a brotes que aún no han florecido, es un grave desafío para el futuro de la humanidad y un crimen de lesa humanidad«.
«No es exagerado decir que toda la Franja de Gaza se ha convertido en un enorme matadero humano y un lugar de masacre de niños», afirmaron desde el ministerio, agregando que, «poco después del final de los bombardeos, el primer ministro Benjamin Netanyahu y las autoridades israelíes están tratando de ocultar su crimen de matar incluso a niños afirmando que Israel es el único país democrático del Oriente Medio en el que todos los ciudadanos, incluidos los árabes y los judíos, tienen los mismos derechos independientemente de su nacimiento».
La Cancillería norcoreana subrayó que la matanza de menores inocentes es un crimen que nunca se puede justificar por ningún motivo, al tiempo que señaló que los medios de comunicación internacionales también condenan enérgicamente al Gobierno israelí «por continuar masacrando a niños y muestran a Israel como culpable de la expulsión de palestinos, de la expansión ilegal de los asentamientos y de sembrar las semillas del odio al suprimir su pacífica ceremonia de oración».
La escalada de violencia entre israelíes y palestinos alcanzó su punto álgido a mediados de mayo tras semanas de creciente tensión. La indignación de los palestinos ante las barreras de seguridad colocadas en Jerusalén Este durante el Ramadán y el desalojo de un vecindario árabe en esa misma zona, junto con el asalto de las fuerzas israelíes a la mezquita de Al Aqsa, fueron los detonantes de la ola de violencia.
Como resultado del intercambio de proyectiles con el movimiento Hamás en la Franja de Gaza, al menos 243 palestinos fallecieron, incluidos 66 niños, y más de 1.900 resultaron heridos. Entre los israelíes murieron 12 personas, incluidos dos niños, y cientos sufrieron heridas.