«Déjame entrar», una obra que reflexiona sobre la sociedad actual

"Déjame entrar", una obra que reflexiona sobre la sociedad actual

Más allá del terror y el suspenso, esta adaptación teatral permite al público meditar sobre lo verdadero e importante.

Del 10 al 12 de julio se presentó en el auditorio de FEPADE la obra «Déjame entrar», una adaptación teatral de Jack Thorne, dirigida por el salvadoreño Migue Siman.

La obra está basada en la novela del mismo nombre, publicada en 2004 y escrita por el sueco John Ajvide Lindqvist, la cual se centra en la historia de Oskar, un chico de 13 años que se enamora de Eli, una vampira que aparenta su misma edad, pero que en realidad tiene 200 años. Eli (Emy Mena) se alimenta de sangre de seres vivos para mantenerse activa.

Toda la trama y acción se desarrolla en Blackeberg, un suburbio de clase trabajadora de la ciudad de Estocolmo, a principios de la década de 1980.

Más allá del suspenso y el terror en el que envuelve al espectador, esta adaptación teatral lleva como fin tocar diversos problemas de la sociedad actual.

La intimidación escolar («bullying»), acoso, maltrato familiar, desamor, drogadicción, alcoholismo y paternidad irresponsable, son parte de las situaciones en las que se ven envueltos los protagonistas.

El mismo Oskar (Paolo Salinas) es víctima de todo esto y cree encontrar en un ser como Eli el amor que no tiene en casa y la fuerza para encarar a los que le dañan. En cierta forma, ella logra acompañarlo en su lucha, pero, finalmente, lo envuelve en sus necesidades de vampiro.

El elenco se completa con otros artistas como Boris Barraza (quien se mete en la piel de cinco personajes), Gabi Rivera (la madre de Oskar), Miguel Amador (Hakan), Carlos Aylagas (en tres papeles), William Castillo, Carlos Hilermann, Fernando Arteaga y Otto Rivera.


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