Después de denunciar por violencia de género hace dos navidades a su expareja, Roman Chernov, de 54, del que tenía una orden de alejamiento, la mujer, de origen ruso, estaba aprendiendo español y participaba en un curso de formación para adultos. Vivía en Dénia con su hija, de 11 años, fruto de una relación anterior. Fueron los gritos desesperados de la menor los que despertaron a los vecinos en la madrugada de este martes. Chernov
El día anterior compró el arma del crimen, un cuchillo de carnicero, y una escalera de tres metros que utilizó para encaramarse al balcón de la vivienda que había compartido con su víctima y en la que ahora vivía ella con su hija, según ha explicado el comisario provincial de Alicante, Alfonso Cid. Hacia las 4.30 de la madrugada, el hombre, también de origen ruso, accedió al balcón del primer piso del bloque, ubicado en la avenida de Valencia, y desde allí subió la escalera y se encaramó al segundo. Al llegar al dormitorio Chernov le dijo a la niña que saliera y que avisara a la policía, tras lo cual agredió «brutalmente» a la mujer, que murió en el acto, según Cid. Juan, vecino del mismo rellano, explicaba este martes que oyó gritos durante la noche.
Cuando llegaron los primeros agentes de la Policía Nacional, la local y una ambulancia la mujer ya había muerto a causa de un corte profundo en el cuello. Chernov ha esperado a la policía en la misma vivienda, donde fue detenido. «Había retomado su vida», ha explicado Javier Escoto, concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de la localidad alicantina. «Es una niña maravillosa, igual que su madre», ha explicado cerca de la vivienda Svetlana, una amiga de la familia muy afectada por la noticia.
Ha preguntado a los policías si podía ayudar y quedarse con ella. El consulado ruso en Alicante está intentando localizar a la familia de la menor.
Riesgo medio
Según Escoto, el presunto asesino fue condenado en febrero de este año por violencia de género, aunque no llegó a ingresar en prisión. La subdelegada del Gobierno en Alicante, Araceli Poblador, ha afirmado que la víctima estaba valorada como de riesgo de grado medio en el sistema de seguimiento de los casos de violencia de género Viogen, lo que implica seguimiento de la víctima, vigilancia aleatoria y seguimiento de los servicios sociales y Centro Mujer 24 horas, así como el teléfono de asistencia Atenpro. «Creo que el sistema no ha fallado», ha defendido, aunque ha reconocido que sí lo ha hecho «algún resorte», que está siendo «evaluado hoy». «Ha habido dos quebrantamientos de condena», ha agregado.
Por su parte, la responsable de violencia de género de la subdelegación del Gobierno, Modes Salazar, ha explicado que «hace dos Navidades» se registró un «incidente grave» y «a partir de ahí se puso la denuncia». Además ha precisado que tenía impuesta como medida cautelar una orden de alejamiento de la niña y de la madre. Este domingo, una joven de 25 años fue asesinada en Vic por su expareja. El asesinato de este martes en Dénia eleva a 1.024 el número de víctimas mortales por esta causa desde que comenzaron a registrarse las estadísticas en 2003.
Además, en lo que va de año, la violencia machista ha dejado a 37 menores huérfanos.