Cerca de las 8 la Luna comenzó a atenuar su fuerte brillo, y, una hora más tarde, más de la mitad del satélite estaba bajo la sombra.
La Luna que fue visible desde gran parte de los países de América del Sur, Centroamérica, y en parte de Norteamérica, Europa y África.
El eclipse de Luna ocurre cuando la Tierra se interpone entre el Sol y ese satélite, por lo cual proyecta una sombra que oscurece a la Luna. Para ello es necesario que los tres objetos estén alineados, algo que no sucede todos los meses porque la órbita de la Luna alrededor del planeta terrestre está inclinada con respecto a la de la Tierra-Sol.