El Salvador continúa dentro del top 50 de países más felices del mundo, según el más reciente índice mundial de la felicidad, publicado en días pasados por la Red de Soluciones para un Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.
El sondeo, que se ha realizado de forma continua por más de 20 años, se efectuó en esta ocasión de forma virtual, debido a las restricciones globales relacionadas con la pandemia de la Covid-19.
De un total de 149 países evaluados, El Salvador se sitúa en el puesto 49, lo que además le permite ser el sexto país latinoamericano con el mejor ranking. Cabe mencionar que el índice de felicidad de los salvadoreños, cayó un 4.52 por ciento, respecto a la evaluación anterior.
En el índice dado a conocer en 2020, El Salvador se situaba en el puesto 34, con una mejora en la percepción de la felicidad de 1.52%. Esto significa que el país ha caído quince puestos, pero aún se mantiene dentro del top 50.
Nuevamente, el índice mundial es encabezado por Finlandia, que incluso mejoró su percepción de felicidad en un 0.42%. En el top ten, el único país no europeo que figura es Nueva Zelanda, que se sitúa en el noveno lugar y es acreditado como un ejemplo mundial en el manejo de la pandemia.
A nivel latinoamericano, el líder del ranking es Uruguay, otro país que manejó de buena manera la pandemia y cuya percepción de felicidad solo cayó un 0.14%. Debido a la forma virtual en que se realizó el estudio, algunos países no fueron tomados en cuenta, como Costa Rica, que suele aparecer en los primeros puestos a nivel mundial.
Otros dos países centroamericanos que aparecen en el top 50 son Panamá y Honduras, los cuales han enfrentado dificultades significativamente mayores a consecuencia de la pandemia, que los mismos El Salvador y Costa Rica.
El informe considera seis indicadores para evaluar en una escala del 0 al 10 la felicidad de las naciones: el ingreso per cápita, el bienestar social, la salud y esperanza de vida, la libertad social, la generosidad y la ausencia de corrupción.
Uno de los aspectos detectados por el estudio es el efecto de la pandemia en el bienestar mental de las personas: “Hubo un aumento de aproximadamente un 10% en la cantidad de personas que dijeron que estaban preocupadas o tristes el día anterior”, señala el documento, que además consigna un aumento del 47% en el número de problemas de salud mental comunicados.