Karina, quien persigue el sueño de ser maestra de música, reconoce que tocar el violonchelo le hizo darse cuenta de que había una vida más allá de la violencia de las pandillas. “Cuando toco, me olvido de los problemas”, dijo la violonchelista.
Barcelona (España), 4 may (EFE).- Karina y Brenda son dos jóvenes salvadoreñas que han pasado de estar cumpliendo una condena en un centro de menores a formar parte de una orquesta con proyección internacional que actuará los próximos días en las regiones de Cataluña (noreste de España) y el País Vasco (norte).
Para estas antiguas reclusas y exmiembros de maras rivales, la música ha sido una terapia frente a la soledad de la reclusión y la problemática de las bandas criminales que azota a El Salvador.
Gracias a la fundación Tiempos Nuevos Teatro (TNT), Karina y Brenda aprendieron a tocar el violonchelo y el violín, respectivamente, durante su estancia en el Centro para la Inserción Social Femenino de Ilopango (El Salvador).
Después de recuperar su libertad, se embarcaron en el proyecto del Ensamble Libertarte, un grupo musical que nació en 2017 como una iniciativa de jóvenes exreclusas y que actualmente les brinda la oportunidad de ejercer su pasión por todo el mundo.
Hasta la fecha, la banda ha participado en más de treinta conciertos, gracias a invitaciones de distintos organismos gubernamentales y entidades de la sociedad civil.
Las salvadoreñas presentaron este martes en Barcelona su gira “Vamos caminando”, que las llevará a distintos puntos de Cataluña y el País Vasco hasta el 28 de mayo.
En declaraciones a Efe, Brenda confesó que, aunque siempre le ha gustado la música, “el violín solo lo había visto en la televisión” hasta que llegó al centro.
Una vez allí, “cuando tocaba sentía que me liberaba, se me olvidaba que estaba encerrada”, recordó.
Por su parte, Karina, quien persigue el sueño de ser maestra de música, reconoce que tocar el violonchelo le hizo darse cuenta de que había una vida más allá de la violencia de las bandas. “Cuando toco, me olvido de los problemas”, dijo la violonchelista.
Las integrantes del Ensamble Liberarte agradecieron el apoyo de los miembros de la fundación TNT, quienes las ayudaron a enfrentarse a la discriminación hacia las personas que han estado privadas de libertad.
“Al retomar la libertad, es otra realidad a la que nos enfrentamos”, declaró Brenda, por lo que ambas jóvenes comparten el deseo de seguir apoyando que más personas que han estado privadas de libertad puedan reinsertarse en la sociedad. EFE